Hannah Bermúdez
Bailarina - Aerealista - Compañera de proceso
Bogotá, 16 de Abril del 2024
Evaluación de pares a Natalia Castellanos Acero
Más de lo que un día imaginaste
Tuve el privilegio de compartir con Natalia clases que exigían un alto nivel de acondicionamiento no solo físico, sino también mental y emocional. Juntas nos enfrentamos a maestros que nos retaban a superar y recrear la auto-imagen que teníamos de nosotras mismas por medio de ejercicios que a primera vista parecían imposibles.
Una de estas clases fue el laboratorio de aéreos, una investigación que se presenta desde la altura, y el manejo corporal fuera del suelo; aquí tuve la oportunidad de acompañar a Natalia en su proceso, donde ella, miedosa y con algo de nervios, comenzó de cero enfrentándose a ejercicios que se le dificultaban; sin embargo, en poco tiempo logró acondicionar no solo su cuerpo, sino su mente para subirse en las alturas y demostrarse a sí misma de lo que es capaz mientras disfruta de un proceso en el que muestra gran control en su cuerpo/mente durante la ejecución de sus movimientos.
Natalia es una artista disciplinada y realmente fuerte tanto corporal como mentalmente, en especial esta segunda, la cual yo diría es su mayor virtud; todo lo que ella se propone lo logra gracias a su pasión y disciplina. Es una mujer que sabe sentarse frente a sus miedos, aceptarlos y convertirlos en trampolines para ser una mejor versión de sí misma, además tiene la capacidad de ver los retos del día a día con paciencia y con amor, valorando cada paso que da.
Estamos hablando de una artista que no solo se esfuerza por si misma, sino que tiene también un interés por el otro; pues en las clases que pude compartir a su lado, entre estas danza contemporánea con el maestro Yovanny Martinez, pude ver en ella gran generosidad y solidaridad al compartir sus conocimientos y escuchar la opción de los demás sin juzgar, al contrario, buscando el aprendizaje, el bienestar grupal y lo mejor para el grupo.
Por otro lado es una gran productora, tuve el privilegio de tener a Natalia como cabeza de producción del ensamble “Para Volar” en el que fui ejecutante; y de primera mano debo admitir que la producción de este no fue sencilla; pues la creativa mente de nuestro director, pidió un bosque en escena, mujeres embarazadas, cartas flotantes, huevos de papel tamaño humano, y mucho más. Peticiones que Natalia, en conjunto con el grupo de producción que lideraba, tuvieron la capacidad de escuchar a Rafael Nieves (director) y llegar a acuerdos y grandes creaciones que hicieron realidad cada sueño que el ensamble propuso.
Con esto hago evidente que Natalia es una artista disciplinada y dedicada, con sentido de comunidad y respeto por el otro. Es una artista que lleva consigo una linda energía y transmite el querer hacer, y realizarlo. Es una mujer terca, en la medida en que encuentra siempre la manera; no obstante es también sentimental y vulnerable, ella no es perfecta y lo sabe, y es otra de sus más grandes virtudes, reconoce que así como ha adquirido un gran estrecho de conocimiento, le falta mucho por aprender y busca esto siempre: aprender -aprender de ella, de sus lesiones, de sus sentimientos, del día a día, y del otro-.
Quisiera agradecer a Natalia por su gran energía, porque con ella logró levantar la mía en mis peores días. Por ser persona, ser humana, y saber escuchar y dar un consejo a quien lo necesita. Por no rendirse nunca y demostrar que las grandes cosas no se logran por contado, sino porque detrás de ello hay un gran esfuerzo y disciplina.
Quisiera hoy con gran orgullo y alegría, dedicarle estas palabras:
“Una mujer de admirar. Una artista ejemplar. Una amiga empática y leal. Me da mucha paz, tranquilidad y emoción pensar que eres tú con quien en un futuro cercano tendré la oportunidad de trabajar. Que serás mi colega y seguirás siendo ejemplo para aquellos quienes empiezan su camino en el arte y con seguridad también para quienes te encuentres en tus pasos.
Mis más sinceras felicitaciones Natalia Castellanos Acero, desde hace mucho eres profesional en tu arte y no me queda más que darte mis mejores deseos, que sigas aprendiendo y te conviertas en mucho más de lo que un día imaginaste.”
Para terminar, hoy quiero invitarte a que mires hacia atrás y te sientas orgullosa de tu proceso, de quien te has convertido y te emociones por lo que viene y quien serás.
Con gran admiración, Hannah Bermúdez